Chartreux
No necesito marcar mi territorio
Procedencia: Francia, aunque hay teorías de que podrían haberlo traído los monjes cartujos de África.
Tamaño: Grande. De 3 a 7,5 Kg.
Cuerpo: Poderoso y macizo, puede llegar a pesar 6 Kg. Espaldas y pecho anchos, como el cuello.
Cabeza: Redonda con hocico triangular, nariz corta y recta.
Orejas: De porte alto, ligeramente redondeadas
Ojos: Ojos redondos de color oro, cobre, amarillo o ámbar.
Patas: Musculosas, rectas, cortas o medianas, muy fuertes, con pies pequeños, redondos y anchos.
Colores: Todas las tonalidades del gris. La piel es azulada.
Cola: De longitud mediana a larga, gruesa y robusta en la base, se va afinando levemente hacia una punta redondeada. Replegada sobre el dorso.
Pelo: Corto, denso, aterciopelado, brillante, recuerda al de la nutria.
Carácter: Manso, afectuoso, listo, independiente, buen cazador.
Ventajas: Los machos casi nunca marcan, son muy limpios. En familia desarrolla una devoción parecida a la de los perros hacia sus dueños. La raza no solo es bien educada sino muy calmada. Es un gato que se usaba para controlar plagas de ratas en monasterios y hospitales y parecen haber tomado un voto de silencio mientras vivían con los monjes pues su vocabulario consiste de chispeos bajitos y murmullos en vez de maullidos fuertes.
Inconvenientes: Come mucho y tiene tendencia a la obesidad.